Nuestro nombre hace referencia a la cara más fría e implacable de la montaña. Con nuestra ayuda, los exploradores han podido alcanzar las cumbres más impenetrables del Himalaya. Sin embargo, la leyenda de The North Face® empieza, irónicamente, en una playa. Concretamente, en el barrio North Beach de San Francisco, que se encuentra a una altura de tan solo 45 metros sobre el nivel del mar. Fue aquí donde, en 1966, dos entusiastas del senderismo decidieron seguir su vocación y fundaron una pequeña tienda de distribución de productos relacionados con la montaña.
Poco tiempo después, esa pequeña tienda empezó a ser conocida como The North Face®, un distribuidor de equipamiento para escaladas y rutas a pie de altas prestaciones. En 1968, The North Face ® se trasladó al otro lado de la bahía de San Francisco para aprovechar el sinfín de posibilidades de la zona de Berkeley y comenzó a diseñar y fabricar su propia marca de prendas y equipos técnicos de montañismo.
En la actualidad, más de 40 años después de estos humildes comienzos, The North Face® cuenta con una completa línea de ropa, equipos y calzado de calidad exclusiva. Rompemos las barreras de la innovación para que quienes confían en nuestros productos rompan las barreras de la exploración. Nos sigue produciendo un enorme orgullo el hecho de ser la marca más elegida por los escaladores, montañeros, esquiadores extremos, amantes del snowboard, corredores de ultrafondo y exploradores más destacados.
No se puede saber qué nos depararán los próximos 40 años. No obstante, existe una sólida certeza: en The North Face® seguiremos manteniendo un compromiso inquebrantable con la superación de los límites del diseño para ofrecerte la posibilidad de superar tus propios límites en la naturaleza.
Never Stop Exploring.